12.9.23

A ti, que me lees...

Estás allí, me miras; en tus ojos
los recuerdos se visten de esperanza,
conviertes en memorias los despojos
de este ruido que soy, en lontananza.
Puedes jurar que sabes mis paisajes,
que recuerdas historias (que no han sido);
tiernamente descifras los mensajes
de aquel que nunca fui (santo y bandido).
Existo para ti (mientras existas),
te acompaño en la ruta (mientras vayas);
donde terminan rumbos y autopistas,
comienzan las cenizas y las playas.
En tus ojos resisto. Agradecerte
posterga olvidos, lágrimas y muerte.

No hay comentarios: